La tecnología en el packaging no tiene límites, por lo que a diario las necesidades y exigencias en la industria son mucho más desafiantes. Co-Inventa en conjunto con la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, desarrollaron investigación en “bioenvases imprimibles con tintas bioactivas encapsuladas con doble funcionalidad: información y aumento de la vida útil en berries”.

El tema representa un salto de innovación que no deja de sorprender en el sector y además, el resultado responde a una clara tendencia del mercado de envases y embalajes para alimentos, que es reducir el impacto al medio ambiente y alargar la vida útil de los productos. Los biopolímeros son biodegradables por lo que permiten no afectar el planeta, a diferencia de los polímeros provenientes del petróleo, es decir los plásticos. A raíz de lo anterior, la investigación de la Universidad de Chile y Co-Inventa aborda la tecnología en el desarrollo de materiales de liberación controlada y la tecnología 2D Y 3D printing que se aplica en packaging y ya se utiliza en el área de la farmacéutica.

“La farmacéutica como pionera, nos ha permitido utilizar esta tecnología y adaptarla a la industria del packaging, dado que se trabaja en ambas áreas con biopolímeros  y con impresión de bioactivos, que para el envasado son antimicrobianos, pigmentos, y biopolímeros destinados al uso de desarrollo de materiales de envase amigables con el medio ambiente​ y que nos permitan extender la vida útil de los arándanos. Adicionalmente esta tecnología entrega información relevante para el consumidor sobre cómo reutilizar el envase”, alude Lilian Abugoch, Académica e Investigadora del Departamento de Ciencia de los Alimentos y Tecnología Química de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile.

La investigación se desarrolla desde julio del año pasado, y dentro de sus resultados, se han definido por ejemplo los biomateriales que se utilizarían en los bioenvases, “tenemos la posibilidad de caracterizar sus propiedades mecánicas, su estabilidad en condiciones de almacenamiento, y la cadena que podría eventualmente seguir luego que el consumidor adquiera el producto”, comenta Lilian Abugoch.

El futuro de los bipolímeros ya son una realidad en el mercado. Investigaciones como éstas favorecen y facilitan una nueva alternativa en la comercialización de envases, por sus propiedades favorables para el desarrollo de packaging para alimentos, como la baja interacción química con el alimento y su reducido impacto ambiental.