Los consumidores están cada vez más exigentes con las marcas, pues no sólo se les pide calidad en sus productos, sino que también en el cuidado que ponen en sus envases.

Por ello resulta tan importante el cómo las empresas están vendiendo sus productos, donde la tecnología y la innovación en el envasado de los alimentos juegan un rol clave.

Las empresas no sólo buscan envases prácticos y funcionales, si no que están buscando materiales más amigables con el planeta, lo que se conoce como packaging eco-friendly, pero siempre resguardando la inocuidad del alimento.

Desde Co-Inventa, Plataforma de innovación de envases y embalajes, nos presentan al menos 5 tendencias que han sido y serán de importancia este año 2019 para el mercado global:

Shelf Ready Packaging (envase listo para la venta al por menor o retail)

Esta tendencia se trata de que el envase sea funcional, fácil de usar, además tiene que servir para reducir pasos o para llegar de un modo más directo a los consumidores. Una derivación es el packaging ready-to-eat (listo para comer).

Packaging sostenible

Los envases “verdes” o el packaging eco-friendly se ha vuelto cada vez más importante para los consumidores en el último tiempo. Los materiales de estos envases idealmente deben ser reciclables o compostables, para reducir nuestros impactos ambientales en el fin de vida de los productos.

Minimalismo en el envase

Esta tendencia trata de usar menos tipos y cantidad de material en la elaboración del envase, lo que tiene una gran vinculación con los envases sostenibles y el cuidado del medio ambiente. La simplicidad en la creación y presentación del packaging aporta valor para el consumidor, que ve reflejado el ahorro de tiempo, la energía y los materiales utilizados.

Envases retro

Las marcas, si bien siempre están al tanto de los cambios en la industria y se adaptan creando envases cada vez más innovadores y modernos, están fabricando envases inspirados en la nostalgia del pasado, diseñando un packaging con un enfoque emocional, principalmente en productos de bebidas y alimentos. Apuestan a que aumentando el recuerdo de la marca mejora la experiencia de consumo.

Packaging personalizado

La personalización de la marca en el envase genera una emoción positiva y a esto han apelado muchas empresas a la hora de buscar estrategias de fidelización. Un ejemplo de packaging personalizado es la campaña que hizo Coca-Cola imprimiendo los nombres de las personas en sus envases de bebida. Las personas no solo compraban para guardar la lata con su nombre, si no que la compraban para regalar a gente que ni siquiera bebe refrescos.