La investigación en materiales biopolímeros imprimibles es una tecnología  de bioenvasado que Co-Inventa en conjunto con la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile desarrollan desde el año 2017, en pro de las necesidades que la industria de berries requiere en cuanto a información y el aumento de su vida útil.

Sin duda los envases activos llegaron para quedarse y la plataforma de innovación para Envases y Embalajes – Co-Inventa – en conjunto con uno de sus co-ejecutores, la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, lo han comprobado. Desde que iniciaron el proyecto denominado “bioenvases imprimibles con tintas bioactivas encapsuladas con doble funcionalidad: información y aumento de la vida útil en berries”, una tecnología que promete ser la alternativa para el diseño de envasado de este producto tan demandado para su exportación.

Innovación que es una clara tendencia en el sector ya que ha sabido responder  a una relevante necesidad del mercado de envases y embalajes para alimentos, que es reducir el impacto al medio ambiente y alargar la vida útil de los productos. Los biopolímeros son biodegradables por lo que permiten no afectar el planeta, a diferencia de los polímeros provenientes del petróleo, es decir los plásticos. A raíz de lo anterior, la investigación de la Universidad de Chile y Co-Inventa aborda la tecnología en el desarrollo de materiales de liberación controlada y la tecnología 2D Y 3D printing que se aplica en packaging y a otras industrias como la farmacéutica.

En los cuatro años que se viene desarrollando la investigación, han logrado al menos cuatro prototipos de biomateriales de fuentes naturales, que permiten la impresión en 2D en ambas caras. En paralelo el equipo ha trabajado en la producción de nanopartículas antimicrobianas que son «tinta antimicrobiana» para hacer la impresión por la cara interna del material de envasado. Agregando además otra tinta de impresión con pigmentos naturales para imprimirla en la cara externa del envase.

Además agrega Lilian Abugoch, Académica e Investigadora del Departamento de Ciencia de los Alimentos y Tecnología Química de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, que han logrado cuantificar la huella hídrica y de carbono de manera teórica, “Estamos realizando pruebas a una escala mayor a la nuestra y con otras técnicas de impresión usadas en la industria, además estamos probando la resistencia a otros pigmentos que se usan en la industria de los alimentos, vamos en pleno desarrollo de prototipos y bioenvases para hacer pruebas de concepto con frutas y estudiar su vida útil, que ha costado mucho por la pandemia”, explica.

Estos claros avances significan abarcar diferentes requerimientos del sector, “El disponer de envases desarrollados 100 % de fuentes renovables, biodegradables y compostables, donde además se utilizan descartes de otras industrias. Por otra parte, este bioenvase tienen doble funcionalidad de proteger al alimento y como posee un antimicrobiano, aumentar su vida útil” agrega Abugoch.